El trading es un juego

El trading es un juego. Esta observación puede resultar sorprendente, pero, analizada con detenimiento, probablemente sea la forma más razonable de plantear esta actividad.
¿Por qué? Porque el trading ha cambiado. Aunque en su momento fue una profesión puesta en práctica por una minoría de profesionales, ahora se ha convertido en una afición al alcance de todo el mundo.
El trading conlleva riesgos. Esta actividad es adecuada únicamente para clientes informados que comprenden el funcionamiento de instrumentos financieros complejos (futuros, opciones, CFD, etc.) y que pueden permitirse asumir riesgos elevados, incluido el de sufrir pérdidas rápidas que excedan los depósitos. Las estadísticas de trading muestran que más del 90 % de los traders pierden dinero. Sea prudente.
Los traders profesionales, una especie en peligro de extinción
En un momento en el que más del 80 % de las operaciones del mercado de acciones ya están automatizadas, se va desvaneciendo el mito del trader profesional tal y como se retrata en las mejores películas de trading.
Sustituidos por algoritmos de inteligencia artificial, los traders institucionales de los cinco mayores bancos de inversión han visto cómo su plantilla se reducía en un 30 % durante la última década, según Bloomberg.
Las soluciones tecnológicas, que son más rápidas, resistentes y fiables, están sustituyendo poco a poco a los traders profesionales por nuevos perfiles, como el de analista cuantitativo.
Trading 2.0: más una afición que un medio de vida
Aunque el tsunami tecnológico actual puede marcar el fin de la edad de oro de los traders profesionales, también puede suponer el nacimiento de una nueva generación de traders independientes.
Estos traders en potencia se están adentrando en el mercado, para bien o para mal, como aficionados con un capital operativo de unos pocos cientos o miles de euros.
Aunque en ocasiones se ven engañados por algunos vendedores de sueños sin escrúpulos que se aprovechan con habilidad de la confusión que surge entre los traders profesionales de los años 80 y los traders aficionados de la década del 2020, estos jóvenes lobos ya se enfrentan a los problemas que plantea la realidad del mercado.
La gran mayoría de los traders particulares pierden dinero con el trading especulativo. ¿Esto debería sorprendernos? En realidad no…
En palabras de Ray Dalio, uno de los mejores especuladores del mundo, «superar al mercado es más difícil que ganar una medalla olímpica».
Frente a fondos de inversión cada vez mejor equipados para aprovechar las oportunidades del mercado y a algoritmos de trading de alta frecuencia cada vez más potentes, conseguir algo de dinero con un teléfono y solo unos clics es una auténtica hazaña.
Pero hablemos de dinero. Probablemente no se va a hacer rico operando, y las posibilidades de ganar capital para complementar sus ingresos tampoco están a su favor.
¿Esto significa que debería dejar de operar con productos financieros? Esta decisión depende de usted, pero lo que sí es seguro es que es mejor pensar en el trading moderno como una afición que como un medio de vida.
Un enfoque nuevo al operar
La actitud de los nuevos traders se basa en elaborar un presupuesto de trading como establecerían un presupuesto para ir de compras, planificar sus sesiones operativas como harían con su actividad deportiva y desafiar al mercado como ir en busca de un tesoro por la pura emoción de la aventura.
Este enfoque razonable, puesto en práctica en el tiempo libre, reduce de forma importante el estrés que genera operar y permite disfrutar del trading en mayor medida, así como desarrollar competencias financieras y de índole no financiera (disciplina, estrategia, creatividad, etc.).
Enmarcado en un calendario y un presupuesto financiero predefinidos, este trading por ocio ayuda al trader aficionado a mantener el control del juego en cualquier circunstancia y a evitar caer en una adicción.
Cada detalle cuenta, pero, a partir de este momento, podrá separar el grano de la paja para no volver a confundirse el trader profesional de los años 80 con el principiante de los años 2020, y así distinguir de forma clara el trading especulativo y la inversión patrimonial.

Maxime tiene dos másteres por la SKEMA Business School y la FFBC: un máster en Gestión y un máster en Análisis Financiero Internacional. Como fundador y redactor jefe de NewTrading.fr, redacta artículos diariamente sobre trading financiero.

